¿Eres emprendedor? ¿Cuántas veces te has arruinado? Yo reconozco que no he llegado a lo que podría llamarse arruinarse, ya que no me tuve que ir de mi casa, aunque durante una temporada tuve que buscarme la vida para pagar la hipoteca, ya fuera tirando de tarjetas de crédito, de mis padres o de lo que hiciera falta.
Es curioso que dependiendo de con quién te juntes las cosas vayan de una manera u otra. Hace 5 años y pico cuando empecé Googlemania todo era un hobbie. Al menos así lo fue hasta que comenzó OJObuscador. En aquel momento ese hobbie se fue convirtiendo en profesión, ya que comenzaba a pedir días de fiesta de mi trabajo como técnico en ITnet para irme a Madrid o preparar el congreso OJObuscador.
Y cuando llegó el momento del congreso tuve que elegir entre ITnet, un trabajo fijo, estable, seguro o tirarme a la piscina sin saber cómo iría el primer congreso y sin saber si había vida más allá.
Tras el primer congreso comencé a trabajar en temas de consultoría, y en lo que se nos daba bien con uno de los ya ahora ex-socios. Meses después, poco antes de verano comencé las gestiones para montar OJO internet S.L., ya que nos comenzaban a ir bien las cosas y teníamos un nivel de facturación que no quería soportar como autónomo. Además, como ya éramos dos, la idea era hacer las cosas serias. En aquel momento también se tuvo que unir a la fiesta David, compañero de viaje (de lejos, pero de viaje) desde la primera época. Es curioso porque, aunque hacía años que hablábamos, nos cruzábamos correos y demás, prácticamente no nos conocíamos, y tuve esa confianza suficiente como para embarcarlo conmigo. Lo que todavía no sé es como sigue siendo un gran amigo y un apoyo en esos momentos duros de OJO, donde todavía sigue enfrascado (y vuelvo a repetir, no sé cómo es capaz de aguantarme) 🙂
Cuando OJO estaba ya en marcha, comenzaron a salir varios temas: por un lado estábamos preparando el congreso OJObuscador 2, y por otro lado, por contactos míos salieron unas consultorías que nos reportaron, en los primeros 4 meses de la empresa unos 30.000 euros. Bueno, no estaba mal comenzar una empresa que el primer año tuvo que pagar 8.000 euros de Impuesto de Sociedades por culpa de los beneficios «no esperados».
Poco después llegaba el congreso. Además, se había incorporado al equipo otro de mis ex-socios (en ese momento no lo era, aunque sí meses después) que se encargaron principalmente del congreso, ya que estaban en Madrid y, al fin y al cabo, era allí donde se hacía el evento, por lo que yo me dedicaba más a la parte «de toda la vida» y ellos llevaban «las cosas nuevas».
Los primeros problemas comenzaron a llegar cuando las cuentas no empezaron a cuadrar. Debíamos tener los ingresos necesarios para organizar el congreso, pero una mala planificación con nóminas y con los ingresos-gastos del congreso me hicieron ver que algo no acababa de funcionar. Aunque en realidad eso se vio tras el último congreso.
El evento nos dejó unas pérdidas de más de 20.000 euros. Eso sí, los únicos que arrimamos el hombro fuimos David y yo. David se apretó el cinturón mucho y comenzó a buscarse trabajillos para poder llegar a fin de mes, y yo, a parte de no cobrar, comencé a inyectar capital a la empresa de mi bolsillo… lo suficiente como para que a finales de año la empresa se mantuviera a flote. Y es que, justo después del congreso decidimos separar la empresa en dos, una que seguía siendo OJO internet y la otra que se dedicaría a la consultoría. Los socios nos dividimos pero, mientras OJO seguía pagando las nóminas de todos (menos la mía… absurdo hubiera sido), la otra empresa (a la que yo nunca llegué a tener acceso a sus cuentas, mientras yo dejaba públicas las «mías») iba ganando dinero.
El primer problema fue cuando OJO «pidió» a la otra empresa que inyectase algo de pasta. Aquello no ocurrió nunca. En resumen: yo había invertido más de 10.000 euros en mi empresa (aún no sé de dónde salió tanta pasta, porque no la tenía) y, por un lado yo estaba con varios créditos para mantener, y OJO también estaba endeudada hasta las cejas.
El siguiente paso ya lo expliqué, así que lo voy a obviar. Primero un viaje a Madrid, y luego el anuncio de mi recompra del 100% de OJO internet S.L. En aquel momento sólo existía OJObuscador, que era «la marca» conocida.
Tras eso me tuve que poner manos a la obra. Creo que al principio, aunque lo pensé mucho, no me entró en la cabeza cerrar la empresa ni por asomo… al fin y al cabo, ahora era completamente mía, tenía un huevo de pérdidas, yo había invertido pasta personal y, al menos, tenía que intentar recuperarla, al menos intentarlo.
El primer paso fue salir de casa. Necesitaba otro ambiente y, un comentario hizo que Carlos me ofreciera volver al equipo de ITnet. No volvía a trabajar allí, pero sí que, aprovechando el cambio de oficinas, nos mudaríamos. Digo nos mudaríamos porque Carmen siempre había estado teletrabajando. Así que comenzamos nuestro camino por las nuevas oficinas. Y Emilio nos invitó a un viaje a Amsterdam, momento en el que pude hablar largo y tendido con Jaume y Carlos sobre la situación de OJO, incluso Emilio comenzó a estar al día, aunque él ya sabía un poco cómo estaban las cosas.
El cierre del 2007 fue desastroso. Algo que nunca acabaré de entender… cómo un año después aún seguía pagando a Hacienda impuestos de 2006 (que como dio muy positivo aún seguía pagando). Aunque 2008 fue el año de los cambios. El que ya no estuvieran mis ex-socios de Madrid hizo que pudiera crecer. Y es que la primera lección de todo esto es que no te asocies con gente que no tiene ni puta idea de negocios y sobretodo que no conozcas suficiente. No entiendo cómo es posible que me asociara con alguien que no sabía hacer ni una factura bien.
Pero, como decía, 2008 ha sido el año de los cambios y expansión. Por un lado el lanzamiento de los nuevos sitios. Un gran acierto el de Carlos que con un comentario en tono jocoso comentó meses antes el lanzar OJOinternet, y que ahora es un producto ya muy decente que ha crecido muchísimo mes a mes, convirtiéndose en el sitio de información de negocios en Internet. Además, hace unos días, revisando las cuentas de 2008 he podido comprobar que, aunque estamos cerca del break even nos hemos quedado a las puertas.
El martes pasado, cuando estaba en la charla que Dídac Lee dio en Iniciador de Barcelona me di cuenta de que no soy el único al que le han ido las cosas torcidas. Bueno, es algo que ya sabía (a mis socios actuales ya les ha pasado varias veces, y muchísimo más bestia que a mi, que, como digo, arruinarse es una palabra quizá algo excesiva en mi situación) pero sobretodo he comprendido muchas cosas:
- Tener claro con quién te ajuntas
- Tener claro si te metes en un negocio el porqué lo haces
- Con un dominio te monto una multinacional (Javier Casares dixit)
- Querer ganar dinero. Hay que ser ambicioso pero sin ser avaricioso (Javier Casares dixit)
- El pasado está ahí, hay que aprender de él e intentar no caer en los mismos errores.
Aunque quizá de lo que más me quedo de la charla de Dídac Lee es una cosa que dijo: en época de crisis se acentúa la imaginación y la creatividad. A mi me ha tocado hacer eso desde hace 2 años, y ahora que estamos en época de crisis lo que estoy haciendo es quizá lo contrario de lo que muchos harían: invertir en mis proyectos.
Desde el verano pasado estoy trabajando en un proyecto bastante potente para OJO, aunque ha estado parado a temporadas. Ahora tengo previsto comenzar a inflarlo para lanzarlo en el momento más preciso (probablemente en 2-3 meses). Además, he fichado a una gran fichaje que es Elisenda. Sin duda una máquina, y es que tengo un equipo que no me lo merezco y que me aguanta mucho. Eso sí, he llegado a la conclusión de que ahora es momento de focalizarse en algunas cosas, por lo que los lectores habituales de toda la red notarán que estamos centrando más esfuerzos en unos productos que en otros, pero es que, hay que ser realistas, hay que comer y ganarse el jornal, y eso implica dedicarse más a lo que da dinero.
Por otro lado, EtheK. Hace un año y poco comenzamos a dar los primeros pasos. Llevamos, sobretodo Jaume y yo, aprendiendo muchísimo del proyecto, que él conocía muy bien, y ahora el equipo va a crecer. La empresa ya está lista, y las 3 personas comenzarán en breve. Además, lo mejor de todo, es que ya es un proyecto rentable, así que el futuro sólo nos lleva a un objetivo: crecer y crecer.
Seguro que muchos os preguntáis el porqué de esta entrada. La verdad es que llevo bastante tiempo queriéndola hacer, pero quizá ahora es cuando veo claro todo lo que ha pasado, y también veo un poco el hacia adelante, una luz en el camino. Una luz que puede ser de una ciudad gigante a la que he de llegar o puede ser la luz del final del túnel, pero, una luz que hace que siga adelante y que, si hace que me tropiece otra vez, me acordaré de que un día escribí una entrada en la que expliqué mis penas laborales para decirme que tengo que seguir adelante en aquello que creo. Eso sí, a base de trabajar y de mi esfuerzo y no a costa de «cualquier cosa» como hacen otros… Nunca dejes muertos en tú camino.