La reputación de una persona es importante… precisamente hace unos días hablaba sobre ello y comentaba que últimamente muchas personas y empresas me preguntan sobre reputación digital en buscadores y ahora me encuentro con un caso que me ha recordado mucho al lío que se montó con la Cicarelli.
Parece que la actriz Isabel Macedo y la modelo Priscilla Crivocapich no se han enterado mucho de cómo va el tema… aunque creo que lo peor es la justicia argentina, que no tiene miras más allá de las empresas conocidas. Las mencionadas y su abogado Martín Leguizamón han pedido a los buscadores que bloqueen páginas de contenido erótico porque estas dos chicas aparecían en ellas «de forma indecente» sin que ellas lo hayan pedido… y es que ahora la culpa de que yo ponga el nombre de una persona en un sitio web va a ser culpa de Google…
¿Cómo es posible que, como hemos visto en varios casos ya en España, la justicia quiera cargarse a los intermediarios y no a la fuente?
Lo peor de todo es tener que leer frases como que el juez Carlos Goggi fustigó a Google y Yahoo! ya que «públicamente se jactan de su pleno dominio de la información y de la precisión y velocidad de sus búsquedas», pero luego invocan «la imposibilidad técnica de cumplir las medidas dispuestas» por la justicia
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Vuelvo a repetir… ¿es culpa de los buscadores que las tías estas aparezcan en una web porno? ¿No será culpa del creador de la web, que es el que realmente está dañando la imagen de esas señoritas? ¿No sería más fácil encontrar el alojamiento del sitio y que el propio ISP con una orden judicial lo retire o deshabilite? No, es más fácil irte a Google para que elimine los resultados de búsqueda y así librarte de tu reputación…
Sigo sin entender como teniendo muy buenos equipos contra delitos tecnológicos haya jueces tan fuera de la realidad de la red y las nuevas tecnologías…